Para mí, sin duda los domingos por la tarde.
Esto sí que es una declaracion de intenciones: el domingo por la tarde, miras con añoranza todo lo que has hecho el fin de semana y con miedo lo que te espera para la semana que acecha....Si el domingo por la tarde te dejas llevar por esta melancolía ¡malo! entonces no levantas cabeza y te supera: empiezas a pensar en todo lo que tienes que hacer y luego la vida que es muy rica en imprevistos y sorpresas te rebosa. Al final en vez de vivir la vida , la vida te ha vivido a tí.
Yo prefiero tomarme este día con tranquilidad y como soy eminentemente positiva, visualizo a grandes rasgos lo que tengo los siguientes siete días, sin darle muchas vueltas y si me agobio pienso en otra cosa: No hay que desperdiciar ni un ápice de energia! la necesitamos toda con esta vida que llevamos siempre con prisas y mas prisas.
Este fin de semana han venido unas amigas de fuera y como siempre, te das cuenta de la mayoría de las cosas por comparacion. La vida en una gran ciudad no tiene nada que ver con el ritmo de vida de un pueblo o una ciudad pequeña. Por eso ahora no me sorprende que varios amigos hace tiempo eligieran calidad de vida, es mas, me parece que tienen una gran valentía y los admiro por ello. Yo dudo que me atreviera.....
En fin, que tambien los domingos por la tarde son melancolicos y asi estoy yo; QUE OS SEA LEVE.
LA UNA